‘Guernica’, un alegato contra la barbarie.
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Lo elemental…
| Historia y arte: los primeros elementos. | ||
| 01 | Verdad / Falso. |  |
| 02 | Unas palabras. | |
La película del profe:
A/ Del horror al lienzo…
La Guerra Civil que empezó en 1936 se estaba desencadenando a través de toda España. Los estragos que causaban las tropas del General Franco asustaron a las poblaciones que se vieron obligadas a huir. La batalla se estaba librando entre dos bandos – franquistas y republicanos – en casi todas las calles del país y el número de vícimas crecía de manera exponencial y alarmante.
Guernica reducida a escombros…
El 26 de abril de 1937 fue cuando el municipio de Guernica sufrió un ataque aéreo que duró más de tres horas y en el que se lanzaron bombas incendiarias. Causaron daños considerables: los edificios fueron reducidos a escombros y los cuerpos se amontonaban por todas partes. Ametrallaron además a los habitantes que salían huyendo despavoridos hacia las afueras de la ciudad. Fueron escuadrillas de cazas Heinkel y bombarderos Junkers alemanes apoyados por aviones italianos los que llevaron a cabo esta siniestra misión. La destrucción del pueblo vasco fue casi total. Así fue como Hitler y Mussolini ayudaron a Franco y, de paso, convirtieron a España en un país satélite para futuros proyectos.
Picasso con rabia y furia…
Al enterarse de la noticia por la prensa, el pintor español Pablo Picasso se quedó conmocionado. Experimentó tanta rabia y furia que decidió no quedarse de brazos cruzados. Encargó una gran tela y se puso manos a la obra. Por aquel entonces, el Gobierno español le había pedido que pintara una obra para la Exposición universal de París de 1937 y lo sucedido en el pueblo de Guernica le vino al pelo: el pintor echó mano de sus pinceles y plasmó los estragos de los bombardeos en su cuadro. Decidió llamar a su obra ‘Guernica’.
Un alegato contra el salvajismo
En este cuadro reconocido internacionalmente, Pablo Picasso reflejó todo el horror del ataque mostrando así su rechazo a la guerra y la barbarie que suponía. Muchos son los que ven en esta obra maestra la voluntad del pintor de mostrar no sólo las atrocidades de cualquier guerra sino también la capacidad del hombre para matarse a sí mismo. Es un reflejo de nuestra locura.
El cuadro de Picasso es impactante. Excede con creces cualquier representación concreta para convertirse en algo universal. Ha adquirido esta dimensión atemporal porque fue concebida y percibida así por el público como una denuncia tajante de los conflictos, un alegato contra la violencia que tiene vigencia en nuestro mundo, un claro ‘manifiesto’ por los derechos del Hombre. Lo que más destaca es que este mensaje que nos lanza a la cara trasciende el puro momento histórico que pretende representar. Picasso pintó un desastre, pero más allá de esta visión caótica y apocalíptica que genera cualquier guerra, se percibe el deseo de transformar al hombre, de llevarlo a cuestionar su formas de pensar y su andar por la vida.
| Guernica y ‘Guernica’. | ||
| 03 | El texto. | |
| 04 | Completar (el texto). | |
| 05 | Vocabulario (el texto). | |
| 06 | Completar (los dos vídeos). | |
| 07 | Vocabulario (los dos vídeos). | |
| 08 | Contar en pasado. | |
B/ El último superviviente…
| Luis Iriondo : ‘Ya no teníamos casa’. | ||
| 09 | Unas frases. | |
C/ La elaboración de ‘Guernica’…
| ‘Un proceso creativo intenso’. | ||
| 10 | Unas preguntas. | |
D/ : ‘Guernica’ y su descripción…
Pablo Picasso (1881-1973) – ‘Guernica’ (1937).
Bajar el cuadro :
1/ La figura del toro:
El toro, animal totémico de la península, que aparece en el cuadro es una figura llamativa primero por el volumen que ocupa y también por el papel que desempeña dentro del conjunto de los muchos símbolos que surgen a su lado.
Tiene la lengua puntiaguda, lo cual le proporciona mayor intensidad al bramido que está dando. Se está quejando de lo que está pasando, pero parece que tiene mucho aguante. De él se desprende mucha estabilidad y se percibe cierta resistencia a lo que pasa alrededor suyo.
Lo que salta a la vista es que está dibujado con ojos humanos. Es la única figura que mira al espectador. Se le ve observando lo que ocurre y se erige en testigo ocular ante el desastre. No le quita ojo al entorno donde se halla. Tiene una postura fija como si quisiera no perder ripio de los hechos. Se mantiene alerta agudizando el oído y la vista. Se podría asimilar el toro a los ojos del pueblo que sufre y que observa detenidamente las atrocidades de la guerra. Siempre se le quedarán en la memoria las imágenes que presencia.
Por lo tanto, se puede afirmar que la figura del toro encarna la memoria del pueblo, este montón de recuerdos que están marcando para siempre a la gente de a pie. El toro, aquí el pueblo, testigo ocular y víctima a la vez, aguanta, de pie, con paciencia y resignación esperando que todo acabe para después, cambiar el orden de las cosas y restablecer su poder. La fuerza tranquila que encarna en ‘Guernica’ tendrá su momento para expresarse realmente. Este toro representa la permanencia de los recuerdos en la mente y la fuerza a punto de desatarse. Aquí, en el cuadro, es un elemento positivo, capaz de darle la vuelta a la situación.
| El toro le dará vuelta a la siuación. | ||
| 11 | La figura del toro (texto). | |
| 12 | ¡Exprésate! | |
2/ La madre con el niño en brazos…
La madre llorando con su hijo muerto en brazos es la imagen más desgarradora del cuadro. Tiene la cabeza echada hacia atrás: es la traducción plástica del incontenido grito de dolor que le está lanzando al cielo. Le arrebataron a su hijo y, por lo tanto, su vida se ha venido abajo. Está hundida, destrozada, desconsolada por lo que acaba de pasarle: ha perdido al ser más precioso de su vida, al ser de sus entrañas.
Al pintarla así, en tal postura, con tal cara, el pintor consigue transmitirnos su ira, su amargura e impotencia. El grito agudo que está dando nos pone los pelos de punta y la forma peculiar de los ojos nos sugiere que está llorando a lágrima viva (= a mares).
Le está haciendo preguntas al cielo con un gesto de la mano: no comprende ni acepta lo ocurrido. Se dirige a un cielo que ni se ve en el cuadro, pero que existe en la mirada y las posturas de los personajes. Esta lengua que se ha transformado en punta acerada recalca lo intenso de su dolor y recuerda también que ya lleva en sí y para siempre un estigma de estos bombardeos, una huella indeleble de este crimen.
Murió un niño, un ser que simboliza la inocencia, la despreocupación, la felicidad, la alegría, las ganas de vivir y también el futuro de un país. El pintor escogió representarlo para insistir en que los bombardeos se cebaron con el pueblo, no perdonaron a nadie. Se abatieron las bombas ciegamente sin miramientos a nadie, lo cual agrava aún más la naturaleza del crimen.
Cuando se mata a un niño, se pisotean los derechos fundamentales de los pueblos y se destruye cualquier atisbo de esperanza, cualquier idea de futuro, lo cual nos lleva a concluir que estos bombardeos son de una barbarie espantosa y, hay que recordarlo, sin precedentes.
| Su vida se ha venido abajo. | ||
| 13 | Una madre hundida (texto). | |
| 14 | ¡Exprésate! | |
3/ La paloma…
La paloma, emblema de la paz que se ha roto, siembra muchas dudas. Está apenas dibujada. Tiene unos rasgos apenas visibles. Picasso eligió pintarla de forma simbólica para restarle importancia. Se ha borrado ante la guerra de cierta manera. En este espacio tan destruido donde no han dejado títere con cabeza, ¿qué representará esta paloma de medio pelo?
Lo que se nota es que no está volando ni levanta el vuelo. Se la ve cayendo del cielo, herida en una de sus alas, mirando hacia el cielo y abriendo el pico como dando un grito de dolor. Se está cayendo de arriba donde ya no cabe. Picasso nos está sugiriendo que el diluvio de bombas les impide a las aves que vuelen, que los cielos ya no son los de los pájaros sino los de los cazas. Se han apoderado del espacio aéreo para cumplir con su siniestra misión: destruir lo de abajo.
La caída vertiginosa de esta paloma nos lleva a imaginar que los cielos están saturados de aviones y bombas y los pájaros ya no tienen cabida en este lugar que era suyo. Los cielos se han venido abajo: caen de ellos las aves y la luz ha desaparecido. Todo se ha vuelto oscuro y gris.
También se puede suponer que la paloma intentó levantar el vuelo para huir de este lugar convertido en el blanco de todas las bombas. No tuvo tiempo para ponerse a salvo y fracasó en su intento. La sorpresa fue total. El ave no se saldrá con la suya. Tanto los cielos como la tierra son un caos brutal. Ni siquiera queda un espacio para refugiarse. El cuadro de Picasso nos ha hecho partícipes de una escena de guerra que lo ha removido todo y de donde no se puede escapar.
Muchos dicen que la paloma podría representar el alma del pueblo español. ¡Puede ser! Pero, anda alicaída y está en un tris de perder la vida. ¿Ha muerto el alma del pueblo español? Con esta guerra que está arrasando con todo, ningún símbolo ni nadie pueden plantarles cara a tantas destrucciones y atrocidades.
| La paloma no se saldrá con la suya. | ||
| 15 | La paloma (texto). | |
| 16 | ¡Exprésate! | |
4/ La lámpara…
Salta a la vista su forma. ¿Será un ojo, el sol, una bomba? ¿Qué significado tendrá la bombilla que está dentro?
La lámpara preside toda la escena y la ilumina. Está en lo alto, colgada del techo, en medio del cuadro donde suele estar el sol que dibujamos en una hoja de papel. Dispara una luz violenta como la de un flash dándole al mural algo de un instantáneo. Todas las actitudes y los movimientos de los personajes nos parecen así suspendidos.
Sin esta luz, nos abrazaría la más completa oscuridad haciendo invisible la masacre. Por consiguiente, se puede considerar que esta lámpara revela lo que está pasando convirtiéndonos en testigos oculares del crimen. En realidad, nos obliga a mirar ‘la foto’, este instante tan efímero y sobrecogedor, para que nos emocionemos y condenemos los hechos.
De esta bombilla incandescente, símbolo de una energía potente, dimana una luz que deslumbra. Este ojo abierto que encandila la escena es el emblema del conocimiento, de la mirada que está indagando, de la percepción intelectual activa: descubrimos los hechos, los observamos más de cerca, los entendemos, nos conmovemos, los condenamos y decidimos actuar en contra de lo ocurrido. La meta del pintor no deja lugar a dudas: removernos la conciencia para que nos comprometamos a cambiar este mundo.
Esta luz representaría nuestros ojos que lo ven todo y que recordarán para siempre lo que están inspeccionando. Ahora, nos toca actuar armándonos de valor.
Muchos de nosotros pueden ver también en este sol, en esta bombilla que lo ilumina todo, una referencia sutil a la luz artificial de los medios de comunicación que se esfuerzan por difundir las noticias. Sin ellos, sin su tarea tan valiosa, nos quedaríamos en la oscuridad, en la ignorancia.
Siempre se ha considerado que la luz revela la realidad y hace posible el conocimiento. Es también fuente de vida. Sin ella, no estaríamos tan instruidos, tan enterados ni tendríamos vida alrededor nuestro como esta florecita, al pie del cuadro, que está creciendo y que nos augura un futuro esperanzador.
| El conocimiento y la vida. | ||
| 17 | La lámpara (texto). | |
| 18 | ¡Exprésate! | |
5/ El caballo…
El caballo ocupa un volumen destacado en el espacio del cuadro. Desempeñará un papel esencial en el conjunto de los significados emitidos por el pintor.
Los acontecimientos en los que está inmerso le han pillado por sorpresa. Parece inocente a todo lo que le está pasando. Se percibe cierta incomprensión por la cara que pone, lo cual hace de él una de las tantas víctimas pasivas.
Nos llaman la atención el grito desesperado que lanza hacia el espectador y la mala cara que pone. El hocico abierto de par en par nos da escalofríos. Se transparenta un dolor inmenso. Se nota que está herido de gravedad. Tiene el cuerpo traspasado por una lanza o por una pica que se suele usar en las corridas de toros. Se retuerce de dolor y al pintarlo así, Picasso quiere que experimentemos su intenso sufrimiento. Se revuelve relinchando y se entiende que se aferra a la vida. Él también tiene la lengua puntiaguda, afilada igual que si fuera un objeto metálico: se agudiza su grito que se nos hace inaguantable y los bombardeos han dejado en él sus huellas.
El pintor escogió mostrar el caballo a punto de morir, con patas rotas. Está pisoteando los restos de un guerrero. Ambos elementos, el combatiente y el corcel, se asocian a la lucha, a la resistencia, a una posible victoria, pero bajo las pinceladas del pintor, están destrozados. Los bombardeos no han dejado títere con cabeza. El pueblo entenderá que no tiene ninguna oportunidad de revertir la situación, de levantar cabeza. Ya no podrá plantarles cara a sus contrarios, la suerte ya está echada.
El caballo siempre ha acompañado al hombre en los campos de batallas, en las conquistas de territorios, en las faenas del campo, en sus desplazamientos diarios y ha contribuido de lleno a la mejora de la civilización. Al matarlo, se destruye a un amigo de toda la vida, fiel y leal, se pone fin a cualquier idea de progreso, de futuro y se deja al pueblo solo, sin poder, sin libertad ni esperanza.
El caballo asociado al toro remite a una tradición española: la corrida de toros por la que se fascinó el pintor. En este espectáculo, al final de la lidia, el torero le da una estocada al toro quitándole la vida. En este cuadro, no muere el toro sino el caballo que está agonizando. Se ha invertido la suerte de cada uno como si se hubiera querido trastocar aquella tradición secular española. Se altera, se desordena esta tradición para mostrar que una de las finalidades de cualquier guerra es arremeter contra la cultura para lastimar el alma del pueblo.
| El caballo en el alma de los españoles. | ||
| 19 | El caballo (texto). | |
| 20 | ¡Exprésate! | |
6/ El soldado o la estatua…
Al pie del cuadro, se ven los restos de un soldado descuartizado. Con la mano derecha, empuña una espada rota, partida, de la que emerge una florecita, señal de vida y resquicio de esperanza. Verla crecer y sobrevivir entre tantas destrucciones es todo un milagro, lo cual nos enseña que el impulso de la vida siempre podrá más que la fuerza demoledora de la violencia. La vida tiene esta capacidad para resurgir de las cenizas.
El héroe guerrero yace por el suelo. Ha muerto dejando constancia de su derrota, pero la presencia de la flor – milagro de la vida – a su vera remite a un mensaje positivo, de esperanza y de movilización: su muerte no es el final de la lucha sino el principio del combate contra lo injusto, lo bárbaro.
Cualquier soldado es un valedor de la paz, pero, en el cuadro, el que pretende velar por ella ha fallecido. Lo han matado haciendo trizas su cuerpo. Se ha sacrificado por los suyos después de haber luchado con uñas y dientes. Aquel hombre es el símbolo de una resistencia heroica: se supone que había sufrido un montón antes de dar el último respiro. El significado de aquel sacrificio debe servirle de mucho al pueblo para que tome el relevo. El soldado está sin vida, pero la mano que sostiene la espada se mantiene con vida por su firmeza y vigor. Invita al pueblo a pisarle los talones y tener la mirada puesta en el futuro. Basta con ver esta mano determinada a plantarle cara al enemigo para percibir que el espíritu de este soldado sigue viviendo en el cuadro, en nuestra alma.
Muchos dicen que este soldado tiene un doble sentido. Ven en él una estatua, símbolo aquí de una cultura maltratada, de una identidad brutalizada y negada. El arremeter contra la cultura de un pueblo es matarlo en sus propias referencias y creencias, en sus costumbres y en su propia historia. La estatua teje una relación con lo pasado y se erige en punto de referencia para que todo un pueblo se junte en torno a una misma visión de su ser profundo y de su pasado con el que se siente identificado. En el cuadro de Picasso, los bombardeos pretenden arrasar con todo lo que remita a la esencia de los españoles prendados de historia y aficionados a su propia cultura. Se mata a un pueblo al negarle los elementos de su identidad, al destruirle su sistema de valores.
| Resistencia y cultura. | ||
| 21 | El soldado o la estatua (texto). | |
| 22 | ¡Exprésate! | |
7/ La mujer del quinqué (= del candil)…
Es el personaje más enigmático del cuadro. Está rodeado de un halo de misterio. Se le ve salir de una ventana, de perfil, como estupefacto, iluminando con un quinqué o candil lo que está ahí fuera. Parece moverse de nuestra derecha a la izquierda dando un grito. Tiene cara femenina. Esta mujer no está pintada de pies a cabeza sino que sólo se le ve el brazo y la cara. No está herida ni nada. Por consiguiente, se la puede considerar como la representación de un espíritu, una alegoría que arroja luz sobre lo que está pasando para observar, investigar, buscar la verdad y convertirnos, de paso, en testigos oculares.
Es un personaje que cumple con el papel de denunciante, de filtrador. Su actuación evita que se tapen los hechos. Al mantener el candil encendido, hace posible que veamos los hechos y estemos así al tanto. Nos está sacando de la ignorancia. Nos lo revela todo para que nos emocionemos y arremetamos contra los verdugos de la matanza. Del candil dimana una luz reveladora de la verdad.
Este personaje femenino parece no tener existencia humana. Da visos de desplazarse volando por el cuadro y nos lleva consigo. Nos invita a hacer un recorrido por el cuadro para que nos demos cuenta de la amplitud de lo ocurrido y midamos las consecuencias de la locura humana. Actúa como si quisiera lanzarnos una advertencia. Se la puede tomar por la alegoría de la verdad.
| Cumple con el papel de denunciante. | ||
| 23 | La mujer del quinqué (texto). | |
| 24 | ¡Exprésate! | |
8/ La mujer arrodillada…
Esta mujer sale de casa despistada, aturdida, desesperada. Se ha asustado. Está de rodillas y a pesar de todo, se da prisa en desplazarse en busca de su propia salvación. Se esfuerza por salir de esta casa destrozada por los bombardeos. Se nota que va casi desnuda y tiene una pierna mutilada, desmedidamente estirada que le impide ponerse de pie y huir a todo correr. En realidad, se está arrastrando. Con una mano, se está tapando la herida que tiene en una de las piernas.
Pablo Picasso, pintor cubista, escogió pintar las consecuencias de los bombardeos sobre la población civil. Para expresar la amplitud de la destrucción y el horror que supone, plasmó la dislocación de los personajes, la deformación de los cuerpos de modo esquemático. Los pintó igual que si fueran unos muñecos desarticulados creando así una impresión de movimiento, de desorden. Es el caso de esta mujer, lo cual infunde repulsión y furia en el espectador.
Al ver el desastre que lo rodea, este personaje femenino no sale de su asombro. Vuelto el rostro hacia lo alto, parece estar sin aliento: está luchando por sobrevivir. Demuestra mucha determinación, mucho empeño para salir adelante. Es, en este sentido, un referente para todos.
El pintor vuelve a enseñar que los bombardeos pillaron de improviso a los vecinos que estaban en casa atendiendo a lo suyo. Hace hincapié en que fueron un crimen indiscriminado y pavoroso.
| Pillaron de improviso a los vecinos. | ||
| 25 | La mujer arrodillada (texto). | |
| 26 | ¡Exprésate! | |
9/ La mujer envuelta en llamas…
A la derecha, se ve un fuego voraz representado por una cresta de triángulos en el tejado de la casa. Una mujer, envuelta en llamas, con los brazos extendidos hacia el cielo, está ardiendo. Pide auxilio a gritos. Parece que se ha echado por la ventana y que se está cayendo.
El grito de dolor que da es tan ensordecedor que se nos ponen los pelos de punta. Nos rompe el alma y nos hace sentir impotentes, pero testigos del crimen. Cuando estamos mirando a esta mujer atrapada entre las llamas, su sufrimiento se nos hace inaguantable. Está consumida por el fuego y nos vemos obligados a desviar la mirada.
Los cazas alemanes e italianos usaron bombas incendiarias que arrasaron con todo. Puede que el pintor aluda al tipo de armas que usaron. Estas bombas que cayeron del cielo pillaron desprevenida a esta mujer que perdió los estribos: huyó como pudo lanzándose por la ventana.
Esta representación recalca la brutalidad de los bombardeos que se hicieron a punta de pala, a ciegas contra un pueblo desprevenido, inocente e indefenso. El pintor plasma un infierno total. Nos enseña un crimen que se está desarrollando ante nuestros propios ojos, un crimen cuyas víctimas sólo son gente de a pie sin miramientos a mujeres ni a niños.
Se nota lo ruidosa que es la escena. Los gritos de esta mujer son agudos, ensordecedores, escalofriantes y van dirigidos hacia el cielo de donde proceden los proyectiles.
| Gritos dirigidos al cielo… | ||
| 27 | La mujer envuelta en llamas (texto). | |
| 28 | ¡Exprésate! | |
10/ El tragaluz como vía de escape…
El tragaluz se ve como una apertura hacia otra realidad, otro horizonte, otro mundo. Rebosa una luz deslumbrante. Esta ventana abierta alberga una esperanza, una salvación para el pueblo y el espectador. Encarna una promesa de cambio de imposible cumplimiento. Estamos envueltos en un momento de una violencia extrema y este tragaluz sería 
como una vía de escape.
Al verlo, nos sentimos atrapados en un espacio cerrado y sobre todo en un momento puntual, pasajero, el de los bombardeos. El clausurar el espacio de esta forma genera, en el espectador, malestar, sofocación, agobio. El pintor da la impresión de que tanto sus personajes como el espectador están encerrados a pesar suyo. El momento que presencian les ha pillado de improviso y lo experimentan como si hubieran caído en una trampa.
Lo interior asemejado a un infierno hecho de llamas, de estruendo, de oscuridad y de gritos se opone a esta apertura hacia lo exterior, una apertura estrecha, pero tan anhelada.
Este tragaluz abierto es una oportunidad para que salgamos de esta barbarie. Sería el emblema de la razón, del intelecto, la imagen de nuestra capacidad para reflexionar. En el cuadro de Picasso, un más allá esperanzador existe, pero los hombres han escogido otra senda.
| La única vía de escape… | ||
| 29 | El tragaluz (texto). | |
| 30 | ¡Exprésate! | |
E/ La estructura, los colores y algo de cubismo…
La estructura:
Se puede ver, en el mural, una estructura equilibrada en tríptico con tres paneles. En el panel de la izquierda, están representados el toro, la madre con el niño en brazos, una paloma. En la parte central se ve a dos mujeres y un caballo y por último, en el panel de la derecha, está la mujer en llamas.
Otro tipo de estructura es la de un triángulo central que va desde la lámpara colgada del techo hasta el soldado tumbado en el suelo. Los paneles de la izquierda y de la derecha quedan delimitados por los personajes que encierran en sí.
El ‘Guernica’ le deja al espectador una total libertad de interpretación. Sea cual sea la estructura que se vea, cada una de ella posibilita una lectura valiosa del mural permitiendo que la mirada se fije en los elementos que le parezcan de interés.
Algo importante es comentar que la escena se desarrolla en un espacio delimitado y cerrado, pero aparece abierto por arriba. La cola del toro, los cuernos, los brazos, los gestos de las manos, el relinchar del caballo, las miradas de los personajes, los gritos que se dan nos llevan hacia el cielo de donde procede la desgracia que se ha abatido sobre la población. Todo nos lleva a imaginar lo que está pasando también en el cielo.
Los colores:
En el mural, la variedad de grises, blancos y negros y su mezcla crean un ambiente que nos infunde malestar, angustia, agobio también. Son colores lúgubres. Pasa a veces que mirando el cuadro, desviamos la mirada.
Picasso pintó su visión de los bombardeos en un espacio cerrado, oscuro eliminando casi todas las referencias a una escena en pleno día con el único objetivo de acentuar el efecto trágico.
Los contrastes blanco/negro nos llevan a enfocarnos en la expresividad de los personajes, en sus actitudes y su significado. El objetivo del artista es conseguir que nos sintamos mal, que nos emocionemos para que condenemos los hechos. Por eso, le damos al mural el estatuto de obra de protesta.
El caos, el desorden, los destrozos tienen mayor efecto, mayor impacto en una atmósfera en la que prevalecen los colores oscuros. El enmarcar la escena en la penumbra favorece a que resurjan en nosotros las emociones más profundas y eso Picasso lo sabe de sobra.
Algo de cubismo:
Picasso es un pintor cubista y las características del cubismo se notan en este mural.
Cualquier obra cubista se da de forma descompuesta y, por supuesto, se exige a un espectador activo que la interprete. De cierta manera, debe reconstruirla en su mente para poder darle algún sentido. En el ‘Guernica’, los objetos y personajes están fragmentados y plasmados en sus partes mínimas. Se pueden ver desde varias perspectivas y como pedazos pegados al lienzo. Muchos de nosotros pueden asemejar el cuadro a un ‘collage’. Esta impresión se puede explicar por el deseo del pintor de representar el efecto propio de un estallido que hace trizas la realidad.
Los pintores cubistas usan trazados geométricos y para ellos, el recurso al color debe ser muy moderado. Representan los cuerpos de manera escasa y sus obras se nos quedan cortas de detalles. Para ellos, lo importante es que nos enfoquemos más en lo que experimentan y expresan los personajes. En el ‘Guernica’, Picasso realza las emociones que se desprenden de las víctimas con objeto de que no se silencien sus voces.
Se nota también que no hay perspectiva. Las formas de lo pintado son planas, a veces desproporcionadas, estiradas, lo cual nos obliga a entender el porqué de tal elección. En este mural, el ejemplo más destacado es el de la mujer arrodillada que arrastra una pierna distorsionada, estirada a más no poder. Se sugieren aquí los daños considerables causados sobre los seres humanos y el enorme sufrimiento que generaron.
| A cada uno le toca ver lo que le dé la gana. | ||
| 31 | Estructura, colores y cubismo (texto). | |
| 32 | ¡Exprésate! | |
F/ Guernica tiene proyección universal…
Picasso cumplió con lo suyo, con su función de pintor. Al enterarse de los bombardeos del mes de abril de 1937 que destruyeron gran parte del pueblo de Guernica, echó mano de sus pinceles, y plasmó sus emociones y visión de los hechos en un cuadro dándole a su mensaje un gran calado. Con el paso del tiempo, ‘Guernica’ se ha convertido en una obra maestra considerada y utilizada como un alegato contra la guerra y un símbolo de paz que muchas veces se rompe en este mundo.
El cuadro de Picasso es una obra con historia y de Historia. La tragedia de los habitantes de Guernica será de aquí en adelante la de todos los pueblos del mundo. El pintor inmortalizó las consecuencias de los bombardeos que les cayeron encima reflejando todo el horror, el salvajismo y la barbarie que suponían animándonos a empatizar con las víctimas. ‘Guernica’ es el recuerdo constante de lo que pasó y por eso, se ha convertido en la voz de todas las víctimas de esa guerra civil.
‘Guernica’ impacta. Da lugar a una multiplicidad de interpretaciones porque reúne, en una sabia mezcla de contrastes y correspondencias, símbolos y referencias, objetos y a personajes que no nos dejan insensibles. El pintor siembra la muerte, pinta destrucciones y atrocidades al lado de señales de vida y de esperanza. El conjunto del cuadro parece una suma de fragmentos y se nota que no hay lógica entre las partes ni congruencia en las actitudes: los bombardeos han hecho pedazos la realidad. Por lo tanto, a cada espectador le corresponde desentrañar las claves y los misterios del cuadro, y eso es lo que hace al cuadro tan enigmático y famoso. El pintor nos invita a que seamos activos y cuestionemos lo que somos en el fondo.
‘Guernica’ tiene pasado y futuro al mismo tiempo. Picasso realizó esta obra mostrando el lado oscuro del hombre, el ocaso de su inteligencia y su capacidad para destruirse a sí mismo. Al plasmar estas atrocidades, espera que su obra deje una huella de lo ocurrido y que el hombre cambie a mejor viviendo en paz.
El pintor nos está enseñando que la obra de arte es un arma para combatir nuestras más oscuras inclinaciones y una herramienta para construir un orden nuevo, lleno de luz y esperanza. ‘Guernica’ trasciende lo que plasma llevando en sí un mensaje para el futuro…
| El ‘Guernica’ tiene pasado y futuro… | ||
| 33 | Una obra impactante (texto). | |
| 34 | ¡Exprésate! | |
G/ Unos comentarios…
María: En mi opinión, lo importante es la impresión que nos queda del cuadro. El mural es grande, impactante, y es un claro grito contra la violencia, ya sea violencia causada por la guerra o por una persecución, o sea lo que sea… Da igual… El mensaje es claro y llega directo, eso es lo que realmente cuenta para mí.
Paco: El uso del blanco y negro le da dramatismo al cuadro. Son los colores del periodismo, del luto. Presenciamos una tragedia que nos da escalofríos. Esta pintura es de una brutalidad supina. No cabe duda sobre la intención del autor: denunciar erre que erre la guerra.
Luisa: ¡Menudo trabajo! Lo que a mí me gusta es que todo es del color del cristal con que se mira. Cada uno de nosotros tiene algo que decir al mirar el cuadro que nos estira un poco más la imaginación. Es una obra universal e intemporal.
Antonio: Al mirar detenidamente el cuadro, he caído en la cuenta de que el pintor ve a los hombres como a unas bestias empeñadas en destruir lo que está alrededor suyo. Quiere que le pongan coto a esa violencia que está hasta en la sopa.
Laura: Yo veo el cuadro como una escena ruidosa. Se oyen gritos, el llanto de las mujeres, el avance de las llamas, el relincho del caballo, los gemidos, el sufrimiento, los alaridos de dolor. Todas las bocas están abiertas. Este cuadro es una obra sobre la voz, el sufrimiento, el dolor. Refleja un horror innoble.
Miguel: Lo sorprendente es que nadie habla de la fuerte presencia del hierro. Son muchos los elementos hechos de esta materia: la lanza que traspasa el cuerpo del caballo, las lenguas puntiagudas, la lámpara en forma de bomba, la espada rota. Es una materia fría que se asocia a la muerte. ¿No os parece?
Nina: Cuando vi por primera vez el cuadro, algo me dio mala espina: el peso de la mirada. Los que gritan de dolor miran, los muertos miran, los heridos miran, la lámpara mira. Se ven ojos por todas partes. Todo está iluminado y todos observan lo que está pasando como si nadie quisiera perder un detalle de esas atrocidades.
Paco: Para mí, Picasso es todo un señor. No se achicó ante las presiones y pintó bajo los efectos de la furia provocada por la actuación de Franco y de sus aliados.
| Da tu parecer… | ||
| 35 | Los comentarios (texto). | |
| 36 | ¡Exprésate! | |
| 37 | El documento del estudiante. | |
La opinión de Nuria:
Nuria Lozano Marne, León, España.
El que mire por primera vez el cuadro ‘Guernica’, quedará marcado de por vida. Es una obra impactante, que no deja indiferente a nadie por su brutalidad y los muchos mensajes que se destacan de ella. Nos anima a todos a reflexionar sobre el valor de la paz, la convivencia, la libertad y sobre lo absurda que es la guerra.
Este cuadro pintado por Pablo Picasso nos recuerda una página oscura, dolorosa y sangrienta de la historia de España, la de la Guerra Civil que empezó en 1936 y acabó en 1939. Guernica, ciudad del país vasco, fue el blanco de un bombardeo tremendo, espantoso, brutal que arrasó con todo, hizo víctimas a mantas y escandalizó al mundo entero.
Picasso reaccionó con furia al enterarse de lo sucedido y plasmó los estragos de estos bombardeos en este cuadro al que le dio el mismo nombre que la ciudad hecha añicos por los aviones alemanes e italianos.
Cuando veo este cuadro, me muerdo los puños de rabia. No entiendo a los hombres cuando deciden matarse a sí mismos, cuando se comportan a lo bestia. El niño muerto, la madre hundida y que grita su dolor al cielo, la mujer envuelta en llamas que está agonizando y el relincho desgarrador del caballo son representaciones que me parten el alma y me enfurecen a la vez.
A través de esta pintura, Picasso nos está diciendo que los hombres no tienen dos dedos de frente. Se han vuelto locos porque prefieren el conflicto a la paz, la guerra a la convivencia, la brutalidad a la inteligencia. Nos enseña que la guerra no lleva a nada sino al caos, al apocalipsis. Uno de los mensajes que nos manda es que la guerra es una lacra y tenemos que demostrar inteligencia para que nunca más destruya algo de nuestro mundo.
Guernica es un cuadro que supera con creces lo que representa: trata de una guerra y de todas las guerras al mismo tiempo. La tragedia que plasmó en 1937 es intemporal y los pocos símbolos de esperanza que se ven, como la flor, la luz del tragaluz o el puño cerrado del soldado nos animan a velar por la paz, la armonía y el diálogo entre los pueblos.
El arte tiene este poder descomunal para universalizar un momento y convertirlo en una idea que nos va a cambiar hacia mejor.
| Esta tragedia es « intemporal ». | ||
| 38 | El texto de Nuria. | |
| 39 | Verdad – Falso. | |
| 40 | Unas palabras. | |
| 41 | ¡Exprésate! | |
| 42 | El documento del estudiante. | |
